El prestigioso economista británico-estadounidense James Robinson, premio Nobel de Economía 2024, reconoció el potencial de Paraguay como ejemplo de desarrollo económico realista y estable en América Latina. Fue en el panel denominado “Comprender los factores clave para el desarrollo económico: El caso paraguayo”, llevado a cabo en la Universidad de Chicago, donde expuso el ministro Carlos Fernández Valdovinos y Robinson ofició de moderador. En la ocasión, el Nobel de Economía se refirió a Paraguay como uno de los pocos que, frente a la inestabilidad regional, ha adoptado un enfoque práctico en sus políticas económicas.
“Lo que está ocurriendo en Paraguay no tiene nada de utópico. Es muy práctico y mira al futuro”, señaló Robinson, quien resaltó que, en contraste con otros países latinoamericanos, las políticas paraguayas buscan soluciones concretas a problemas como la desigualdad y la pobreza, integrando tanto la macroeconomía como la microeconomía.
Durante su intervención, refirió que no sabe con certeza cuál es el modelo de éxito paraguayo, pero mirando los datos, se han logrado muchos éxitos a nivel económico, a pesar de las dificultades que aún afronta el país en materia de corrupción y transparencia.
El destacado economista resaltó cómo Paraguay ha priorizado políticas inclusivas, poniendo como ejemplo la preservación del idioma guaraní en el ámbito institucional, lo cual, según él, es un reflejo del compromiso del país con su identidad y diversidad cultural. “Es el único país en América Latina donde los criollos o lo que sea hablan una lengua indígena”, comentó, subrayando la singularidad del modelo paraguayo respecto a otros países de la región.
Asimismo, comparó a Paraguay con otras naciones que, a pesar de sus historias de éxito, enfrentan actualmente desafíos de estabilidad social. Mencionó a Chile como un ejemplo de país que, tras décadas de crecimiento y reducción de pobreza, ha vivido episodios de descontento social. Sin embargo, sugirió que Paraguay, a diferencia de Chile, podría evitar este tipo de crisis gracias a su modelo inclusivo y su estructura política relativamente estable.
El actual Nobel de Economía cerró su ponencia alentando a Paraguay a continuar articulando y fortaleciendo su modelo único para evitar los problemas que han impactado a sus vecinos, reconociendo que su desarrollo inclusivo y pragmático podría consolidarse como un pilar de estabilidad y crecimiento en América Latina.